Aspirantes a neurocirujanos 3D
Operar un cerebro para extirpar un tumor maligno puede ser una de las intervenciones quirúrgicas más arriesgadas. Por eso, las simulaciones virtuales y recreaciones 3D del cerebro son, en la actualidad, unas extraordinarias herramientas de formación para los neurocirujanos del presente y del futuro.
En la Unión Europea, el estudio del cerebro humano no es algo nuevo. Diversos proyectos internacionales abordan las herramientas que aspiran a conocer sus grandes misterios y, así, “atacar” a algunos de sus principales enemigos: los tumores, enfermedades como la epilepsia o degenerativas como el alzheimer.
Y en esta carrera científica, las tecnologías 3D han llegado para quedarse. Ya es impensable que cualquier disciplina médica no recurra a estas innovadoras técnicas quirúrgicas, menos invasivas y más exactas.
El proyecto BrainIT es un claro ejemplo del interés de la Unión Europea por formar a los neurocirujanos del futuro en la aplicación de estas técnicas novedosas, con la colaboración de varias universidades del continente que cuentan con expertos en la materia. Es el caso de la ULPGC, universidad socia de este apasionante proyecto que lidera la Universidad rumana Lucian Blaga University of Sibiu, y en donde también se cuenta con la universidad italiana Unicusano.
El proyecto BrainIT es un claro ejemplo del interés de la Unión Europea por formar a los neurocirujanos del futuro en la aplicación de estas técnicas novedosas, con la colaboración de varias universidades del continente que cuentan con expertos en la materia
El objetivo es formar a estudiantes de últimos cursos de Medicina de estos centros universitarios en las últimas técnicas de la neurocirugía, con el apoyo de material didáctico basado en la tecnología 3D que se desarrolla, entre otros, por el Centro de Fabricación Integrada de la ULPGC: especialista en la reproducción y simulación real de cráneos humanos o de diferentes patologías de tumores.
Así, siete estudiantes de la ULPGC han formado parte de la primera Escuela de Verano BrainIT, que tuvo lugar en Rumanía. Todos ellos, estudiantes de cuarto y quinto de Medicina, coincidieron con estudiantes de las otras universidades socias en un curso intensivo de dos semanas donde los últimos avances en tecnología médica o de realidad virtual adaptada a la neurocirugía fueron los principales protagonistas.
Y con estos estudiantes, también acudieron algunos expertos investigadores de la ULPGC: Mario Monzón, del Centro de Fabricación Integrada de la ULPGC; y los investigadores Nayra Pumar y Juan Ruíz, del grupo de investigación en tecnologías médicas.
A su vuelta, los siete estudiantes de la ULPGC valoraron la gran experiencia vivida en la Universidad Lucian Blaga. La opinión es unánime. “Ha sido especialmente enriquecedora no solo a nivel académico, sino personal y humano”, destacan. “El proyecto BrainIT no sólo nos ha permitido ahondar y afianzar nuestros conocimientos en neurocirugía; sino también ver todo el trabajo de los diferentes campos de la ciencia que existen detrás de todos los pequeños avances técnicos, así como los materiales que se emplean de forma rutinaria en el hospital”, explicaba Inés del Pino Díaz, estudiante de 5º de Medicina. “A medida que fue avanzando la semana, los talleres que nos impartían empezaron a ser más dirigidos a los estudiantes de medicina y la segunda semana fue íntegra de prácticas quirúrgicas”, comentaba la estudiante Claudia Cuenca, que también resaltó de manera especial la gran acogida que tuvieron por parte de los estudiantes y profesores rumanos.
“El proyecto BrainIT no sólo nos ha permitido ahondar y afianzar nuestros conocimientos en neurocirugía; sino también ver todo el trabajo de los diferentes campos de la ciencia que existen detrás de todos los pequeños avances técnicos, así como los materiales que se emplean de forma rutinaria en el hospital”, explicaba Inés del Pino Díaz.
Por su parte, el estudiante Axel Mariño, subrayaba la excelente formación adquirida en materia de nuevas tecnologías médicas, “que nos ha permitido fijar conceptos muy importantes en nuestro proceso de aprendizaje”.
La estrecha relación vivida con estudiantes rumanos también ha sido un aspecto destacado por los alumnos de la ULPGC: “El viaje ha sido una mezcla de culturas a pesar de encontrarnos en la misma comunidad Europea”, comentaba la estudiante Fátima Infante, que le pareció especialmente interesante “la motivación” de los estudiantes rumanos en su formación médica: “Quizás en lo que concierne a salud pública y medicina en general España es muchísimo más puntera que Rumanía, sin embargo, la motivación estudiantil y la experiencia que adquieren en la carrera es mucho mayor que la nuestra. De hecho, muchos estudiantes allí eran capaces de operar con la supervisión de cirujanos”.
En ese sentido también opinaba la estudiante Gara Rodríguez, que resumía esta experiencia como “una oportunidad de conocer otros métodos de trabajo, la vida y la cultura del país al que viajas y en definitiva, te ayuda a abrir la mente”.
Porque la formación académica fue solo la justificación para vivir una experiencia personal única junto a otros universitarios europeos. “La convivencia con ellos fue, sin duda, la mejor parte de este viaje”.